martes, 29 de julio de 2008

Ira

Iría, cruel e insana, un millón de voces barboteantes recorren la mente, mientras un torrente de pensamientos atroces atraviesan tu razón cegándola, como relámpago conjurado por Zeus llega de una sola mirada, con una sola palabra. Ecos y recuerdos de dolores pasados, sentimientos desbocados.
Un temblor se domina del cuerpo, se nubla la cordura y la fuerza brota se aprietan los puños, se inflan los pulmones la sangre corre quemando las venas, la cordura se paraliza y queda indefensa como oveja ante los lobos. Es así como la furia aullante, irrazonable, incontenible controla mente y cuerpo como uno solo para verter el resentimiento en la forma más atroz y violenta.

No hay comentarios: